El ingreso de cerdas de reposición es una de las prácticas más riesgosas para la bioseguridad en las granjas porcinas. En este artículo escrito por Inma Martín, Veterinaria de Thinkinpig, aprenderemos cómo realizarlo y qué factores se deben tener en cuenta.
Seguramente muchos de nosotros ya sabemos
algo de lo que implica la seguridad en nuestras granjas, pero es más que necesario reforzar este tema.
Debemos tener como norma que la sanidad de un nuevo lote sea mejor que la del destino, pero a la vez que sea inmune a las enfermedades de la granja a la que acaba de llegar.
La llegada de reemplazos siempre es un riesgo en las granjas.
El contacto de animales infectados y susceptibles es una de las principales vías de entrada de enfermedades.
Para ello, es necesario maximizar las medidas de bioseguridad, utilizando de manera estratégica la fase de cuarentena.
¿Qué aprenderemos?
- Vacunación: permite establecer inmunidad adquirida
- Feedback: aportar sustratos que contengan elevada cantidad de microorganismos
- Seeders: animales enfermos de la propia granja: cerdas de descarte, lechones infectados
- Localización: la sala de cuarentena debe estar lo más alejada del área de producción(mínimo 1km)
- Alojamiento: los sementales deben alojarse de manera individual (mín 3m2), las hembras en grupos de no más de 10 animales (1.5m2/cerda)
Si quieres revisarlo, puedes visitarnos en nuestra web
porcino.info
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